Hace falta una verdadera unión hispana en Toronto y Canadá

Una máxima de la vida es que “la unión hace la fuerza”, algo que entienden hasta los niños, y sin ir muy lejos los animales, pero que es muy difícil que entienda la comunidad hispana en Canadá.

EDITORIAL.- Profesionales, medios de comunicación, artistas, empresarios, políticos, líderes comunitarios, profesores, estudiantes, defensores de derechos humanos, funcionarios hispanos dentro de entidades del Gobierno, cuerpos diplomáticos, deportistas, y general la comunidad hispana, esa que habla un mismo idioma, aunque sus miembros pertenezcan a varios países, debería tomar mucha más conciencia de la importancia de ir unidos a la hora de luchar por nuestros derechos como inmigrantes, de participar en política en este país, en proyectos, de luchar por recursos para nuestra gente, de organizar eventos, de participar en ellos, entre otras cosas, porque la desunión está matando muchas iniciativas que podrían servirnos a todos y no nos deja avanzar a la velocidad que marchan otras comunidades de inmigrantes en Canadá, como los chinos, los griegos y los italianos.

Hay muchos elementos que están generando la desunión, y como en cualquier familia de vecino, el dinero es uno de los principales, pero hay otros factores como la envidia, la lucha de liderazgo que podría ser buena, pero no cuando se da atacando al contrario, o mintiendo, o engañando., falsos lideres A esto súmele el mal concebido nacionalismo, que en muchos casos no ayuda a que se de esos lazos fuertes entre hispanoamericanos que tanto beneficios y buenos resultados ha logrado en Estados Unidos y para completar la falta de verdaderos líderes que miren el bien común por encima del bien particular y de esos sí que hacen falta muchos por aquí.

Para la muestra de esta lucha entre hermanos que hablan un mismo idioma y que deberían tratarse mucho mejor, basta con mirar lo que está pasando con la pelea por los recursos del Gobierno y lo que se puede hacer dentro de los Juegos Panamericanos Toronto 2015, a los que vendrán más de 10 mil atletas de nuestros países, pero donde hay choques de “trenes” entre la misma comunidad por ver quién puede sacar mayor provecho paras sus proyecto individuales o influir dentro de la organización, cuando deberían estar unidos para darle el gran protagonismo a la comunidad dentro del gran evento deportivo, porque esta oportunidad difícilmente se volverá repetir.

A esto súmele que los latinos al parecer no están ni unidos, ni interesados en las decisiones del país, al menos eso quedó demostrado en el debate de los candidatos a la Alcaldía de Toronto, organizado para los hispanos y por hispanos, al que muy poco asistieron, ni que hablar del apoyo a los candidatos latinos al Concejo Municipal, brilla por su ausencia, cuando debería ser todo lo contrario.

La envida nos mata, o sino agréguele a esta desunión que mucha personas acuden más rápido a un evento si la organiza un canadiense o una persona de otro país, que si ven que lo hace un hispano, o que para hacer negocios prefieren comprar a otra persona que a un hispano, algo que no pasa entre los chinos, portugueses e italianos y para completar que hay empresarios latinos que explotan mucho más a los recién llegados de nuestra región, que los mismos canadienses, y ni que hablar de los que buscan solo trabajadores voluntarios, cuando reciben mucho dinero por su labor.

En fin hay una cantidad de factores que generan desunión y que se presentan en todas las comunidades, algunas con justificada razón, porque hay quienes se cansaron de luchar, otros porque fueron engañados y muchos porque no se sienten representados por los líderes de nuestra misma comunidad, pero que hay que ir eliminado, porque necesitamos en este momento marchar unidos.