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Los grandes cambios que han afectado la migración en Canadá

05 de Junio de 2013 a las 15:40

TORONTO.- Desde el año 2008 cuando llegó a su cargo el ministro de Migración y Ciudadanía de Canadá, Jason Kenney, anunció que el sistema migratorio estaba desgastado y necesitaba cambios profundos. Cinco años después, el Gobierno, con el apoyo del Parlamento ha implementado una serie de medidas que han afectado a miles de inmigrantes, algunas para bien, pero según los críticos la mayoría para mal. 

El Ministro ha logrado que todo se le apruebe, lo malo o lo bueno de los actuales programas de migración de Canadá, se le debe a él, de ahí que muchos críticos lo señalan como el gran responsable de los problemas que se están generando con los procesos migratorios en Canadá.

La mayores críticas contra el Ministro llegaron luego que se pudo demostrar que aunque cerca de 1.3 millones de canadienses, incluido miles de inmigrantes, no tienen empleo, Kenney le permitía las empresas contratar personal extranjero para suplir vacantes, a los que los empleadores les podían pagar mucho menos que un empleado local, porque eran trabajadores temporales, que luego tendrían que abandonar el país. Se estima que en Canadá hay alrededor de 500 mil trabajadores temporales.

La medida afecta principalmente a más de 250.000 nuevos inmigrantes que llegan cada año, porque pese a que son profesionales altamente calificados, como lo exige el programa migratorio, no les es fácil encontrar un trabajo. Su tasa de desempleo es el doble de la tasa de los canadienses nativos. De cuatro que consiguen un empleo, tres no están trabajando en su campo, pese a que supuestamente fueron seleccionados por sus perfiles, porque la realidad es que sus puestos ya han sido llenados con temporales, mano de obra barata y flexible para los empresarios.

Bajo la premisa que Canadá requiere más inmigrantes, porque ellos reemplazar la generación denominada “baby boom”, que se están jubilando; porque hacen los trabajos que  muchos canadienses no quieren;  porque se van a las zonas alejadas sin problemas; porque permiten que crezca la economía al aumentar el consumo de aspectos tan importante como la alimentación, la vivienda, los autos, los seguros, entre otros aspectos, se siguen trayendo miles de inmigrantes profesionales cada año, pero de acuerdo a los críticos estas personas que tanto bien le hacen a la nación, se encuentran con una cruda realidad, el sistema nos les permite trabajar en los que estudiaron, las normas los obligan a prácticamente iniciar de cero, y sus expectativas de mejorar su calidad de vida se reduce porque no encuentran las facilidades que les debe brindar el Gobierno.  

Otro gran cambio que se ha dado es con el programa de refugiados, porque aunque muchos aplauden las medidas de control implementadas para evitar los fraudes, los defensores de estas personas, especialmente los médicos, no se explican como en un país como Canadá se decide dejar a estas personas sin servicio de salud, con sus graves consecuencias.

La reunificación familiar es otro de los programas críticos por las demoras. Hijos y cónyuges deben esperar casi dos años o más, mientras padres y abuelos, prácticamente quedaron por fuera del sistema, porque se congeló el patrocinio, y no volverá a abrir hasta el próximo año. Para muchos inmigrantes la queja más común es que muchos de sus padres y abuelos estarán muertos cuando se les apruebe el proceso, porque el tiempo de ejecución se está demorando en 7 y 10 años.

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