Alrededor de 500 mil inmigrantes no tienen servicio de salud en Canadá

TORONTO.- Personas muriendo por enfermedades que se pueden tratar, de cáncer o por falta de una cirugía, niños agravan su situación, mientras esperan un tratamiento médico que los podría salvar y en general pacientes seriamente afectadas por las disposiciones del Gobierno Federal que limitó el servicio de salud para los inmigrantes sin estatus legal, es el cruel panorama que sufren miles de personas que viven en el país, según el reporte del Consejo de Salud de Toronto, que describe la crisis por las que están pasando estas personas.

¿Qué esta primero la salud de una persona o su estatus migratorio?, esa fue la pregunta que resonó con más fuerza en Concejo Municipal de Toronto, organismo que voto a favor de que a todas las personas, sin distingo, que viven en la ciudad deben recibir atención médica, algo que va contraposición de lo determinado por el Gobierno Nacional.

Se estima que alrededor de 500 mil personas viven en Canadá sin un servicio de salud, de las cuales 100 mil residen en el área de Toronto. Los médicos han denunciado que muchas de estas personas indocumentadas han estado cayendo enfermos y muriendo porque no han podido ser atendidos debido a las normas nacionales existentes y porque muchos de ellos no acuden oportunamente a los hospitales o centro asistenciales, porque tienen miedo de ser detenidos y deportados, y cuando toman la decisión de ir al doctor ya es demasiado tarde.

Pese a que la norma establece que en algunos casos estos inmigrantes pueden ser atendidas por alguna emergencia o en el servicio básico de salud, el problema más grave lo sufren todos aquellos que tiene una enfermedad como cáncer, o requieren algún tipo de cirugía programada, porque ellos deben pagar, o esperar que alguna organización o voluntarios los puedan atender.   

El Concejo de Toronto está haciendo historia al votar a favor de poner la salud de las personas antes de su estatus migratorio, medida surge de las recomendaciones de la Junta de Salud, que pidió proporcionar acceso a servicios a todos los residentes de la ciudad.

Con la determinación del Concejo Toronto se convierte en una especie de santuario de la salud para los inmigrantes sin seguro médico, afirman los médicos que consideran que es un paso muy importante para mantener a miles de personas fuera de los hospitales, porque se le podrá brindar una atención oportuna.

La medida fue aún más lejos, porque ahora Toronto le está pidiendo al Gobierno Federal revoque la norma que determinó recortes en el Programa de Salud Federal Interino que ha dejado a miles de personas sin acceso a la atención médica.

Algunos centros asistenciales venían atendiendo estos pacientes sin seguro, como mujeres embarazadas que no cuentan con atención prenatal, niños hijos de nuevos inmigrantes que necesitan cirugías, pero que deben esperar hasta tres meses por el trámite del seguro salud provincial, personas con cáncer, algunos solicitantes de refugio y en general enfermos sin ningún estatus o que perdieron su condición, que empeoran su situación médica, porque no tienen acceso a la atención sanitaria.