Crecen las críticas al nuevo sistema migratorio canadiense

Por CIRO ALQUICHIRE V. Los defensores de los inmigrantes, los sindicatos, los trabajadores, y los canadienses en general, aceptan que hay muchos cambios que se debían dar en Migración, pero están solicitando una profunda revisión a lo que está haciendo el actual Gobierno, porque muchas de las medidas no solo están afectando a los que quieren venir, vivir, trabajar o estudiar en Canadá, sino también a los que ya llegaron con residencia a este país, a los refugiados y hasta los que ya se convirtieron en ciudadanos.

TORONTO.- Que ahora los inmigrantes son ciudadanos de segunda, que pueden perder sus derechos fácilmente; que los solicitantes de refugio quedaron sin ayudas; que cada vez es más difícil y largo el trayecto para convertirse en canadiense; que las residencias permanentes para los padres de familia se embolataron; que se quiere solo emigrantes profesionales, en determinadas carreras y que hablen inglés o francés fluidamente, pero no los dejan trabajar cuando llegan, y sí se deja la puerta abierta a trabajadores temporales, con más bajos salarios y menos exigencias, y en fin una serie de quejas, reclamos y críticas se vienen dando desde que en el año 2008 el actual Gobierno conservador anunció que el sistema migratorio estaba “desgastado y necesitaba cambios profundos”.

Hace 6 años Migración Canadá emprendió toda la transformación del sistema que aún no termina, pero que tiene sufriendo a muchos inmigrantes dentro y fuera del país, porque no saben en qué momento les cambian las reglas de los procesos, y si es tan bueno o no venir a Canadá. Por ahora el Gobierno se debe dar por satisfecho, porque logró que el Parlamento prácticamente aprobará sin problemas todos los cambios que ha sugerido, pero son medidas que han afectado a miles de inmigrantes, algunas para bien, pero según los críticos muchos para mal. 

El Ministerio de Inmigración y Ciudadanía se defiende y dice que busca la manera de traer al país personas muy preparadas profesionalmente, sin problemas legales, y que no resulten una carga, sino un gran beneficio para el país, además que algunos de los cambios fueron solicitados por los mismos ciudadanos, incluidos los inmigrantes, como un mayor control al ingreso de personas, evitar los fraudes, los engaños al estado y a los canadienses, evitar el otorgamiento de refugios y ayudas a los que no lo requieren, y en general muchas cosas que se pensaron eran buenas, pero que al final terminaron complicando la vida de muchos personas que quieren emigrar, residir, vivir y ser ciudadanos canadienses. Al menos así lo sienten muchas organizaciones que defienden los derechos de los refugiados, de los inmigrantes y de los trabajadores extranjeros temporales.

La mayores críticas contra el Ministerio se están dando en el enredo que se ha armado en el proceso para los inmigrantes que vienen a solucionar muchos de los problemas de Canadá, extranjeros que se requieren para enfrentar la falta de personal calificado o para reemplazar a las personas que están envejeciendo y se están jubilando, los que requiere el país para poder mantener el crecimiento poblacional y económico, y no se generen problemas en el futuro. Contradictoriamente las nuevas normas permitieron que mientras cerca de un millón de canadienses, incluido miles de inmigrantes no tienen empleo en Canadá, el Gobierno abriera sus puertas para que las empresas contrataran extranjeros para suplir vacantes, a los que les pueden pagar mucho menos, lo que afectó a los que llegan con residencia, a los que ya llegaron y a los que están por venir, porque no hay trabajos para tantos profesionales y los pocos que hay se los están dando a los temporales que le salen más baratos a los empleadores.

Cada año el país acepta alrededor de 250.000 nuevos inmigrantes, la mayoría de ellos profesionales altamente calificados, como lo exige el programa migratorio, pero increíblemente no les facilita encontrar un trabajo dentro de sus profesiones, por los requisitos que deben llenar para poder trabajar. La tasa de desempleo de ellos es el doble de la tasa de los canadienses nativos.

En medio de todo esta compleja transformación del sistema migratorio, el Gobierno sigue realizando cambios, en busca de mejorarlo, pero muchos creen que el objetivo que es dar un mejor nivel de vida a los que llegan, a los que ya viven en este país, y especialmente a los canadienses, no se está cumpliendo, porque el programa tiene muchas fallas, ¿usted qué opina?