Amazonas se quema, frente a la lenta reacción para salvar el “pulmón del mundo”

Fuertes críticas contra el Gobierno de Brasil y la reacción de las grandes potencias

Por el peligro que representa para la humanidad los incendios en la Amazonía se han transformado en una crisis internacional, al punto que fue el tema central en la cumbre del G7 en Biarritz, Francia, donde los líderes mundiales, fuertemente criticados por su lenta reacción, alcanzaron un acuerdo para ayudar a combatir los incendios, mientras en Brasil su presidente sigue siendo acusado de negligencia.

PARIS.- El panorama es triste, peligroso y representa un grave peligro para la humanidad, porque se está quemando nada menos que el pulmón del mundo. Solo en Brasil, que alberga el 60% de la selva del Amazonas, el número de incendios forestales creció en un 84% entre enero y agosto de 2019 con respecto al mismo periodo del año anterior, por ello hay una presión internacional para que los grandes líderes se movilicen, actúen y enfrenten la tragedia ambiental.

"Todos acordamos ayudar a aquellos países que han sido azotados por los incendios lo más rápido posible", aseguró el presidente de Francia, en Biarritz, donde se reunían los mandatarios de las grandes potencias mundiales, entre ellos Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Canadá.

Por ahora el G7 decidió aportar una ayuda de urgencia de 20 millones de euros (22 millones de dólares) para salvar la Amazonía, (el mundo esperaba mucho más). El dinero se utilizará para el envío de aviones bombarderos de agua que luchen contra los incendios.

Esta "iniciativa para la Amazonía" fue anunciada tras una sesión de la cumbre del G7, luego de un encuentro en el que no participó Donald Trump, reticente a pronunciarse contra la emergencia climática y su aliado el Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que ha sido fuertemente criticado por su lenta reacción.

En Brasil, los granjeros y ganaderos durante mucho tiempo vienen talando y quemando parte de la selva, para ganar terrenos, pero la deforestación y las quemas desde el año pasado van en aumento, y todo indica un cambio inquietante dentro del actual Gobierno. Por ello los incendios que se extienden por la Amazonía elevaron la tensión entre los líderes de la Unión Europea y el gobierno de Jair Bolsonaro.

Los ataques más graves han sido los lanzados el pasado fin de semana sobre Emmanuel Macron, anfitrión en la localidad francesa de Biarritz la cumbre del G7, y su esposa, Brigitte Macron. Un tuit del presidente francés culpaba a las políticas de Bolsonaro de los fuegos en el Amazonas. También lo acusaba de mentir sobre compromisos con la protección del medioambiente.

Además amenazaba a con vetar el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur si Brasil no garantiza el cuidado de la Amazonía. Bolsonaro respondió que los incendios forestales "no pueden usarse como pretexto" para aplicar sanciones al país.

El ministro de Educación brasileño, Abraham Weintraub, atacó personalmente a Macron en varias ocasiones en su cuenta de Twitter. "Es sólo un imbécil oportunista que busca el apoyo del grupo de presión agrícola francés", escribió después de decir que la "falsa crisis" del Amazonas es la reacción del lobby de los agricultores europeos a la "inminente invasión de productos brasileños" junto con las "ONG izquierdistas y artistas enojados".