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¿Será que SNC-Lavalin terminará con Justin Trudeau?

21 de Marzo de 2019 a las 18:42

Por: Luis Moreno   CANADÁ – De acuerdo con varias encuestas de opinión pública, si hoy hubiera elecciones federales, el régimen político de Justin Trudeau seria derrotado y el partido Conservador formaría gobierno. Esta es la realidad en la que se encuentra el gobierno de Justin Trudeau después de haber explotado la bomba del controversial caso con la gigante firma de ingeniería SNC-Lavalin. La ex-Ministra de Justicia y Fiscal General, Jody Wilson-Raybould testifico ante el comité de Justicia de la Cámara de los Comunes que enfrento la presión política de distintos miembros de altos rangos dentro de su propio partido [Liberal] para evitar que SNC-Lavalin se enfrente a un juicio penal por acusaciones de corrupción. ¿Cómo le está afectando este escándalo político a la credibilidad del Primer Ministro, Justin Trudeau?   La reconocida revista canadiense, Maclean’s publico una columna titulada, “Justin Trudeau, imposter” [Justin Trudeau, impostor]. La nación se encuentra dividida ya que la credibilidad del Primer Ministro se encuentra en cuestión. Por una parte, los simpatizantes liberales continúan defendiendo a la administración de Trudeau ya que no fue el Primer Ministro quien supuestamente forzó a Wilson-Raybould de evitar que SNC-Lavalin se enfrente a un juicio penal. Pero, por otro lado, los partidos de oposición creen que Justin Trudeau y su gobierno debería de responder por las acusaciones de Wilson-Raybould. El líder del partido Conservador, Andrew Scheer exigió la renuncia de Trudeau como Primer Ministro y Jaqmeet Singh, líder del NDP pidió que se investigue a fondo dicho escándalo.  El secretario principal y mano derecha de Justin Trudeau, Gerald Butts fue el primero en renunciar de la Oficina del Primer Ministro antes de que Wilson-Raybould testificara ante el comité de Justicia. Butts es considerado como la “mente maestra” del régimen de Trudeau en la Cámara de los Comunes. Según el testimonio de Wilson-Reybould, otros once oficiales de la Oficina del Primer Ministro están involucrados en dicho escándalo. A pesar de que el Primer Ministro ha hecho todo lo posible para mantener una postura “transparente”, de acuerdo con una encuesta conducida por The Globe and Mail, más del 50% de los canadienses creen que SNC-Lavalin debería enfrentar un juicio penal. La actual estrategia de Justin Trudeau es de enfocar la atención al combate climático. El pasado lunes 4 de marzo, la ministra del Medio Ambiente y Cambio Climático, Catherine McKenna y Justin Trudeau organizaron una reunión en Toronto para discutir legislaciones para mejorar el medio ambiente, pero a pesar de dichas estrategias, los canadienses demandan respuestas.   Aunque parece que el gobierno de Trudeau está manejando este escándalo con táctica y diplomacia, su gobierno también se está viendo afectado por las renuncias de dos importantes Miembros de Parlamento. Sin tomar en cuenta la renuncia de Wilson-Raybould del gabinete de Trudeau, Celina Caesar-Chavannes MP por Whitby anuncio que no buscara ser re-elegida en las próximas elecciones del 19 de octubre. Cabe mencionar, que Caesar-Chavannes es amiga y defensora de Wilson-Raybould. Quien también se suma a la lista, es ahora ex-Presidenta de la Junta de Tesorería, Jane Philpott. “Lamentablemente, he perdido la confianza en como el gobierno ha tratado este asunto y en cómo ha respondido a los problemas planteados”, dijo Philpott en un comunicado momentos después de haber presentado su renuncia al Primer Ministro el pasado 4 de marzo.   El escándalo político SNC-Lavalin está deteriorando al Primer Ministro, Justin Trudeau. Hace unas pocas semanas atrás, la popularidad de Trudeau estaba inalcanzable por sus oponentes, pero según algunas encuestas de opinión pública, el líder de la oposición, Andrew Scheer tiene mejores posibilidades de formar gobierno en octubre de este año. ¿Hasta cuando se dará a conocer la verdadera versión de tan polémico escándalo político? Por: Luis Moreno

CANADÁ – De acuerdo con varias encuestas de opinión pública, si hoy hubiera elecciones federales, el régimen político de Justin Trudeau seria derrotado y el partido Conservador formaría gobierno. Esta es la realidad en la que se encuentra el gobierno de Justin Trudeau después de haber explotado la bomba del controversial caso con la gigante firma de ingeniería SNC-Lavalin. La ex-Ministra de Justicia y Fiscal General, Jody Wilson-Raybould testifico ante el comité de Justicia de la Cámara de los Comunes que enfrento la presión política de distintos miembros de altos rangos dentro de su propio partido [Liberal] para evitar que SNC-Lavalin se enfrente a un juicio penal por acusaciones de corrupción. ¿Cómo le está afectando este escándalo político a la credibilidad del Primer Ministro, Justin Trudeau?

La reconocida revista canadiense, Maclean’s publico una columna titulada, “Justin Trudeau, imposter” [Justin Trudeau, impostor]. La nación se encuentra dividida ya que la credibilidad del Primer Ministro se encuentra en cuestión. Por una parte, los simpatizantes liberales continúan defendiendo a la administración de Trudeau ya que no fue el Primer Ministro quien supuestamente forzó a Wilson-Raybould de evitar que SNC-Lavalin se enfrente a un juicio penal. Pero, por otro lado, los partidos de oposición creen que Justin Trudeau y su gobierno debería de responder por las acusaciones de Wilson-Raybould. El líder del partido Conservador, Andrew Scheer exigió la renuncia de Trudeau como Primer Ministro y Jaqmeet Singh, líder del NDP pidió que se investigue a fondo dicho escándalo.

El secretario principal y mano derecha de Justin Trudeau, Gerald Butts fue el primero en renunciar de la Oficina del Primer Ministro antes de que Wilson-Raybould testificara ante el comité de Justicia. Butts es considerado como la “mente maestra” del régimen de Trudeau en la Cámara de los Comunes. Según el testimonio de Wilson-Reybould, otros once oficiales de la Oficina del Primer Ministro están involucrados en dicho escándalo. A pesar de que el Primer Ministro ha hecho todo lo posible para mantener una postura “transparente”, de acuerdo con una encuesta conducida por The Globe and Mail, más del 50% de los canadienses creen que SNC-Lavalin debería enfrentar un juicio penal. La actual estrategia de Justin Trudeau es de enfocar la atención al combate climático. El pasado lunes 4 de marzo, la ministra del Medio Ambiente y Cambio Climático, Catherine McKenna y Justin Trudeau organizaron una reunión en Toronto para discutir legislaciones para mejorar el medio ambiente, pero a pesar de dichas estrategias, los canadienses demandan respuestas.

Aunque parece que el gobierno de Trudeau está manejando este escándalo con táctica y diplomacia, su gobierno también se está viendo afectado por las renuncias de dos importantes Miembros de Parlamento. Sin tomar en cuenta la renuncia de Wilson-Raybould del gabinete de Trudeau, Celina Caesar-Chavannes MP por Whitby anuncio que no buscara ser re-elegida en las próximas elecciones del 19 de octubre. Cabe mencionar, que Caesar-Chavannes es amiga y defensora de Wilson-Raybould. Quien también se suma a la lista, es ahora ex-Presidenta de la Junta de Tesorería, Jane Philpott. “Lamentablemente, he perdido la confianza en como el gobierno ha tratado este asunto y en cómo ha respondido a los problemas planteados”, dijo Philpott en un comunicado momentos después de haber presentado su renuncia al Primer Ministro el pasado 4 de marzo.

El escándalo político SNC-Lavalin está deteriorando al Primer Ministro, Justin Trudeau. Hace unas pocas semanas atrás, la popularidad de Trudeau estaba inalcanzable por sus oponentes, pero según algunas encuestas de opinión pública, el líder de la oposición, Andrew Scheer tiene mejores posibilidades de formar gobierno en octubre de este año. ¿Hasta cuando se dará a conocer la verdadera versión de tan polémico escándalo político?

 

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