Canadá crea 3 sitios más para que drogadictos se inyecten bajo supervisión y sin peligro

Se busca evitar muertes por sobredosis y transmisión de enfermedades

En 2016, más de 900 personas murieron de sobredosis en BC, y en Montreal se pasó de 94 a 180 en menos de dos años, por ello Health Canada, creada para salvar vidas, ha emprendido una labor por proteger la de los drogadictos, especialmente porque la mayoría de muertos son jóvenes. Se están creando en las ciudades de mayor consumo, lugares especiales en donde un drogadicto ingresa, le suministran las jeringas gratis y lo que requiera para que se inyecte ahí mismo, bajo la supervisión de un médico, enfermeras o personal capacitado, que estarán pendiente para ayudarlo en caso de una emergencia por sobredosis.

QUEBEC.- Después de Vancouver que fue la ciudad pionera en la creación de sitios especiales para que los drogadictos se puedan inyectar bajo supervisión, en un esfuerzo del Ministerio de Salud por detener las muertes por sobredosis que se están registrando en todo el país, y para evitar también la transmisión de enfermedades con jeringas contaminadas, porque la mayoría de los adictos las reutilizan, Health Canada anunció la apertura de tres lugares más de inyección supervisada en Montreal, mientras Ontario se compromete a financiar lugares más en Toronto que podrían costar alrededor $ 1,6 millones.

"El gobierno de Canadá está comprometido a hacer su parte para hacer frente a la crisis de salud pública relacionados con sobredosis de opioides y muertes a través de Canadá," dijo el ministro de Salud Jane Philpott en un comunicado.

Los sitios Montreal estarán ubicados en los distritos de Hochelaga-Maisonneuve y Ville-Marie, que son reconocidos por la cantidad de drogadictos que ahí conviven. Las personas que usan drogas son supervisadas por personal capacitado que puede intervenir en el caso de una sobredosis. Las instalaciones también proporcionan material estéril, información sobre los efectos de las drogas y los tratamientos que hay para los drogadictos que requieran ayuda, y también atención básica en salud.

Aunque algunos canadienses han criticado al Gobierno porque creen que no se deben gastar dinero de los impuestos en facilitarles el consumo a los drogadictos y ayudar a personas que ni siquiera lo piden, cuando hay personas enfermas que lo necesitan y lo piden, lo que llevo al gobierno de Stephen Harper a bloquear el programa, la realidad es que con estos sitios si se salvan vidas, por ellos desde diciembre el gobierno liberal anunció el apoyo a la creación de estos sitios en donde se requieran. "Los sitios de consumo supervisado han mostrado resultados positivos en Canadá, así como en otros países", escribió Health Canada.

Para el organismo que se encarga de la salud de los canadienses, estos sitios, que realmente son cuartos adecuados para que los drogadictos ingresen sin miedo, mientras los supervisan por intermedio de un vidrio, ha logrado bajar considerablemente la transmisión de enfermedades y muertes por sobredosis, pero especialmente el uso de la sala de urgencias de los hospitales a donde llegaban estas personas.

Actualmente el Gobierno busca crear en diferentes ciudades del país estos lugares para drogadictos, pero los solicitantes deben proporcionar evidencia de que lo requieren, y estar apoyados por la Policía y las autoridades de salud regional.