Primera Revocación de la Ciudadanía Canadiense

A pocas semanas de las elecciones en Canadá, el gobierno decidió aplicar por primera vez la facultad de revocación de la ciudadanía canadiense establecida en la nueva ley de ciudadanía. El gobierno ha procedido con la revocación de la ciudadanía canadiense de una persona condenada por actividades terroristas. Recordemos, que desde la aprobación de la ley para fortalecer la ciudadanía canadiense (Bill C-24) no se había ejecutado ninguna revocación de este tipo bajo el nuevo procedimiento y los nuevos supuestos que incluyen la condena por terrorismo, traición al país o espionaje. 

En el año 2006, Zakaria Amara, un joven nacido en Jordania y con nacionalidad canadiense, fue arrestado por actividades terroristas al planear un atentado contra instituciones públicas en la ciudad de Toronto, estos atentados tenían como objetivo el Toronto Stock Exchange y el Royal Canadian Mounted Police (RCMP). Zakaria Amara y sus cómplices fueron condenados por estas actividades y actualmente se encuentran en diferentes cárceles de Canadá. Evidentemente, este caso tuvo una muy fuerte repercusión en la sociedad canadiense y en este momento nadie podría estar en desacuerdo en que se les aplique todo el peso de la ley; estas personas intentaron crear terror y asesinar personas inocentes. Por el contrario, la principal crítica en la aplicación de la nueva ley no se encuentra en la medida ejecutada sino en el momento en que el gobierno decide aplicarla y en la estrategia política en esta aplicación.  

El candidato por el partido NDP, Tom Mulcair ha afirmado que los conversadores están usando esta medida para poner el tema de seguridad en el centro del debate semanas antes de la elección. Por su parte, el candidato del partido liberal, Justin Trudeau ha propuesto la completa eliminación de la nueva ley (Bill C-24), así como una serie de cambios en materia de inmigración. Estos 2 candidatos expresaron claramente sus ideas en el debate del día de ayer sobre políticas exteriores en la ciudad de Toronto, señalando que de llegar al poder eliminarían la nueva ley. En realidad, el gobierno conservador estaría tratando de recuperar terreno en los temas de inmigración, debido al  problema de los refugiados sirios, que les ha causado serios dolores de cabeza. En todo caso, el tema de la primera revocación de la ciudadanía canadiense parece ser una acción meditada y con un trasfondo político debido a la cercanía de las elecciones. 

Evidentemente, el gobierno está jugando sus últimas cartas para atraer los votos que le permitan continuar en el poder, en las redes sociales la aceptación a la medida ha sido positiva. Desde mi punto de vista, la nueva ley ha generado muchas críticas sobre todo por la facultad de revocación de la ciudadanía, por lo que con esta medida estarían buscando sacar una ventaja política. Si bien este tipo especifico de casos de revocación de la ciudadanía no generan controversia, debemos estar vigilantes en relación con otras situaciones que no sean tan claras, por lo pronto, la validez de la nueva ley está siendo discutida en los tribunales canadienses.   

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